En el mundo moderno de los negocios, destacarse de la competencia es una tarea difícil. Las empresas pueden beneficiarse enormemente de una de las estrategias más prometedoras, que es ofrecer productos que se puedan configurar según los deseos de los clientes. Esto permite a las empresas abordar directamente las necesidades o preferencias de cada cliente mientras aumenta la probabilidad de que dicho cliente se conecte profundamente con la empresa, ya que satisface todas sus necesidades. Esta práctica mejora la satisfacción del cliente y, consecuentemente, fortalece la lealtad a la marca.
Existen varias opciones para la personalización, que incluyen: diseños personalizados, colores específicos y combinaciones de tamaños, características selectivas y atributos funcionales, etc. Permitir a los clientes modificar un producto según sus preferencias es una técnica efectiva para fomentar la lealtad a la marca. Sirve para mostrarles a los clientes que la empresa los valora y es capaz de ofrecer soluciones personalizadas. Cuando una persona disfruta de un nivel tan alto de personalización, es más probable que se sienta más involucrada con el producto y la marca.
Además, los productos personalizados permiten a las empresas diferenciarse de la competencia. Los clientes de hoy en día tienen muchas opciones para elegir, y la personalización es una manera para que una empresa se distinga. Podría ser un producto mejor adaptado al público de un juego específico, o podría ser un estilo de vida particular. Las empresas pueden ofrecer personalización que les permita dirigirse a demografías específicas de clientes. En tiempos donde el mercado ha estado saturado con soluciones SAY y GET, aquellos que venden opciones alternativas tienden a tener una ventaja competitiva.